RATÓN QUE TE PILLA EL... DEDO
Estas semanas estoy asistiendo a un acontecimiento bastante sorprendente: niños de 7-8 años que no saben usar el ratón del ordenador.
Realmente era predecible. Ahora todos los dispositivos informáticos son táctiles o, como mucho, tienen ratón tipo "pad", el de los ordenadores portátiles.
Es normal que los más pequeños se habitúen al uso de las pantallas táctiles. Recordemos que el primer gesto que realiza un niño con las manos es señalar. Señala lo que quiere con el índice. Y eso es exactamente lo que tienen que hacer sobre la pantalla, señalar con el índice.
Lo que me preocupa es la pérdida de destreza óculo-manual que permite el ratón del ordenador, además de la capacidad de uso de los dedos de manera individualizada, ya que cuando se enfrentan a este periférico informático, pulsan con todos los dedos a la vez.
Puede resultar demasiado arcaico lo que estoy diciendo, pero en una generación donde no juegan apenas con plastilina, no realizan pulseras con hilos, no juegan con las canicas, con la peonza y no tienen juegos de montar o construir (o los montan los adultos antes de entregárselos) las habilidades manuales se están perdiendo. Sí que es cierto que niños que toquen instrumentos como el piano, la guitarra o la flauta; están trabajando la movilidad manual. Pero incluso para aprender a tocar estos instrumentos, los niños necesitan un trabajo previo que les prepare para saber mover individualmente sus dedos, entre otras habilidades.
Ni que decir tiene la importancia que esto tiene para la escritura. Falta de control del lapicero, errores notables en la pinza digital, grafía irregular en forma y tamaño, entre otras consecuencias negativas que provoca el uso (y abuso) del ordenador frente a otras actividades de ocio.
Además, ya ni siquiera escriben con el teclado, saben que existe un micrófono que transcribe todo lo que dicen sin necesidad de saber realmente escribir.
Por eso desde mi humilde posición, os invito a que os desconectéis, les desconectéis, y busquéis alternativas de ocio que, además de ser divertidas, les ayuden a fortalecer las capacidades que el ordenador "discapacita".
Realmente era predecible. Ahora todos los dispositivos informáticos son táctiles o, como mucho, tienen ratón tipo "pad", el de los ordenadores portátiles.
Es normal que los más pequeños se habitúen al uso de las pantallas táctiles. Recordemos que el primer gesto que realiza un niño con las manos es señalar. Señala lo que quiere con el índice. Y eso es exactamente lo que tienen que hacer sobre la pantalla, señalar con el índice.
Lo que me preocupa es la pérdida de destreza óculo-manual que permite el ratón del ordenador, además de la capacidad de uso de los dedos de manera individualizada, ya que cuando se enfrentan a este periférico informático, pulsan con todos los dedos a la vez.
Puede resultar demasiado arcaico lo que estoy diciendo, pero en una generación donde no juegan apenas con plastilina, no realizan pulseras con hilos, no juegan con las canicas, con la peonza y no tienen juegos de montar o construir (o los montan los adultos antes de entregárselos) las habilidades manuales se están perdiendo. Sí que es cierto que niños que toquen instrumentos como el piano, la guitarra o la flauta; están trabajando la movilidad manual. Pero incluso para aprender a tocar estos instrumentos, los niños necesitan un trabajo previo que les prepare para saber mover individualmente sus dedos, entre otras habilidades.
Ni que decir tiene la importancia que esto tiene para la escritura. Falta de control del lapicero, errores notables en la pinza digital, grafía irregular en forma y tamaño, entre otras consecuencias negativas que provoca el uso (y abuso) del ordenador frente a otras actividades de ocio.
Además, ya ni siquiera escriben con el teclado, saben que existe un micrófono que transcribe todo lo que dicen sin necesidad de saber realmente escribir.
Por eso desde mi humilde posición, os invito a que os desconectéis, les desconectéis, y busquéis alternativas de ocio que, además de ser divertidas, les ayuden a fortalecer las capacidades que el ordenador "discapacita".
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