EL COFRE DE LAS IDEAS
Tras la Navidad, los niños más afortunados disponen de una nueva tanda de juguetes que, en la mayoría de los casos, es incompatible con el espacio disponible. La teoría de cuanto más grande sea el bolso, más cosas llevo; se extiende al espacio de las casa. Grandes o pequeñas, la llegada de un niño las inunda de juguetes. Y no solo la vivienda en la que reside, también las casas de abuelos, tíos, segundas residencias... Ahora es momento de pararse a pensar varias cuestiones: - ¿Lo utiliza? - ¿Es adecuado a su edad? - ¿Tengo el espacio adecuado para su uso? - ¿Tengo el espacio adecuado para guardarlo cuando no se use? Lo más habitual es que acumulemos juguetes que llevan tiempo sin usar o que no los vayan a usar por ser más infantiles. Lo más operativo es darles un nuevo uso; donándolos, vendiéndolos o regalandolos a algún familiar o amigo que sí los vaya a usar. Si por el contrario los queremos conservar, os doy la clave para fomentar su uso. Lo primero, es dar protagonism...